jueves, 23 de julio de 2015

El último vagón

El Último Vagón

En esta ocasión, cedo mi espacio en el blog a uno de mis pacientes, que tuvo la amabilidad de escribir este testimonio tras su paso por el Programa Victoria para la primera edición de mi libro Objetivo: Libertad - Hoja de ruta para salir del laberinto del alcohol.

Con mi agradecimiento hacia él y hacia tantos otros que me han enseñado tanto a lo largo de mi vida profesional, te dejo con sus palabras.
 

Te envidio, afortunado lector de este libro.
Si yo hubiera alcanzado la fortuna de haberlo tenido en mismanos hace años, en las páginas de mi vida habría habido menos dolor.

Te supongo afectado por la misma enfermedad que yo -la adicción-y no sólo una persona curiosa que quiere saber por dónde anda la investigación en el campo de la drogodependencia.Si es así, este texto puede ser la llave que cambie tu existencia y que como a mi, te salve.

Las enfermedades no reparan en el currículo de quienes las padecen, de modo que la máxima autoridad en cardiología puede morir de un infarto. Yo mismo he tenido que estudiar muchas horas la psicología del comportamiento humano y las técnicas de modificación de la conducta, y para nada me han servido a la hora de hacer frente a mi propio alcoholismo.

Pero tal vez esos saberes fríos, junto a la experiencia de haber estado varias veces en clínicas supuestamente especializadas en la atención a los pacientes que sufren esta enfermedad, me permiten valorar en su justa medida el trascendental avance que supone la obrade Bernardo Ruiz y su equipo: el Programa Victoria.Por primera vez, gracias a él, he visto la luz en un túnel de tinieblas que supuse que no tenía salida.

Es muy poco lo que se sabe en el ámbito del cerebro humano, ese gran desconocido. Apenas un diez por ciento. Y sin duda esa falta de soporte científico es una de las razones por las que fracasan las terapias que se aplican para superar esa extraña enfermedad. Pero estoy en condiciones de afirmarte, lector amigo, que si has intentado curarte una y otra vez sin éxito, ahora tienes la gran oportunidad de salir del laberinto.

Mi experiencia personal al haber logrado maniatar la adicción, maniatar, no matar, ya que te acompañará hasta el último día de tu vida, no es ni única ni excepcional entre quienes hemos seguido su terapia.

El enfoque que el profesor Ruiz hace de la adicción es absolutamente original e innovador. Y en un alto porcentaje, sus soluciones pragmáticas han servido para romper las cadenas que oprimen nuestra libertad.

Te aconsejo con todo el calor de que soy capaz que no te limites a la lectura de las páginas de este libro. Que si quieres volver a ser dueño de tu destino, asistas a uno de sus cursos. Así podrás comprobar que puedes poner, como yo y como tantos otros, fin a tu condena.

Te escribo estas líneas como el hombre que lanza un aro salvavidas a quien ve que se está ahogando. Aprovecha esta ocasión. Tal vez sea el último vagón de un tren que se escapa sin retorno. No lo dudes, súbete a él con fe y piensa que si otros lo hemos logrado gracias a las teorías y técnicas del Programa Victoria, tú también puedes lograrlo.

Sin duda todavía te quedan años de vida. De ti depende que los vivas plena y libremente. Yo también he estado en muchas ocasiones a punto de tirar la toalla, desesperado, hasta que la suerte, o la Providencia, me llevó a conocer al autor de esta obra, hito en la investigación más rigurosa avalada por el éxito.

No te cuento “mi caso”. Por desafortunadas que hayan sido tus experiencias no creo que superen a las mías. Se que no estoy curado. El alcoholismo no desaparece jamás, pero sí que es posible eliminar todos sus síntomas, que es lo que en definitiva importa. Sumérgete en el agua clara de la lectura de “Objetivo: Libertad” y participa en alguno de sus seminarios. Un sol nuevo, radiante, alumbrará desde entonces tu camino. ¡Suerte, amigo! Y gracias, Bernardo, y no olvido a tu constante apoyo, María Eugenia, por haberme liberado.

IOX - Paciente del Programa Victoria en 2002.




Bernardo Ruiz VictoriaPsicólogo Clínicowww.programavictoria.com